Sinopsis:
Teresa es una joven dominada por la ambición, pero no está dispuesta a trabajar
y esforzarse para salir de la pobreza en que vive, si no que opta por el camino del engaño y la traición. Sus padres han hecho
grandes sacrificios por darle una vida digna y sin carencias, pero para Teresa nada es suficiente. Su novio Mariano siempre
la ha apoyado y la quiere sinceramente, pero Teresa lo ve simplemente como su propiedad, el enamorado que siempre estará incondicionalmente
a su disposición. Una y otra vez lo despreciará para ir tras hombres con poder y fortuna, y sólo volverá con él cuando vea
que hay otras mujeres, como su amiga Aurora, que se interesan en Mariano.
Su primer prospecto será Paulo, el mejor
partido de la preparatoria donde Teresa estudió becada, pero cuando él descubre sus mentiras y se entera de su condición económica,
cancela su matrimonio con ella y trata de hacerla su amante. Cuando ella se niega, Paulo la pone en ridículo frente a todos.
La venganza de Teresa vendrá tiempo después y Paulo terminará siendo presa de las drogas.
Más tarde, Teresa pondrá
la mira en su maestro, Arturo de la Barrera, quien le pagará la carrera y se enamorará perdidamente de ella. Teresa convence
a la hermana de Arturo, Luisa, de que sus padres no la quieren y la maltratan, por lo que Luisa la lleva a vivir a su casa.
Allí, coquetea sutilmente con Arturo y casi lo vuelve loco. Sin embargo, la ética de Arturo, y la promesa que hizo al padre
de Teresa, no le permiten confesar su amor hasta que ella termine la carrera de leyes y deje de ser su alumna. Finalmente,
cuando ella se gradúa, vuelve a despreciar a Mariano, acepta casarse con Arturo y viaja con él a Europa. Pero antes de casarse
conoce a Fernando, el prometido de Luisa, un millonario europeo que pertenece a la nobleza. De pronto, Arturo deja de ser
suficiente para Teresa, y su nuevo blanco es el novio de Luisa, a quien hasta entonces llamaba su mejor amiga.
Así, comenzando con sus padres, Teresa irá destrozando, uno a uno, el corazón
y la felicidad de quienes la rodean; sin pensar en que, tarde o temprano pero inevitablemente, a todos nos llega el momento
de saldar cuentas con la vida.
|